jueves, 14 de diciembre de 2017

Asesinato en el Orient Express (2017)***

Dir: Kenneth Branagh
Int: Kenneth Branagh, Penélope Cruz, Willem Dafoe, Judi Dench, Johnny Depp, Michelle Pfeiffer, Daisy Ridley,  Josh Gad, Tom Bateman, Derek Jacobi, Manuel García-Rulfo, Leslie Odom Jr., Lucy Boynton, Sergei Polunin, Olivia Colman, Miranda Raison, Chico Kenzari, Ziad Abaza.


Durante un viaje en el legendario tren Orient Express, el detective belga Hercules Poirot (Kenneth Branagh) investiga un asesinato cometido en el trayecto. Las portentosas capacidades deductivas del investigador se enfrentan al hecho de que todos los pasajeros del tren son evidentemente sospechosos.

Esta historia fue primero una conocida novela de misterio de la escritora británica Agatha Christie,  publicada en 1934. Como casi todas sus obras, ha sido fuente de inspiración para el cine. De hecho, esta adaptación dirigida por Kenneth Branagh y escrita por Michael Green, un guionista de moda que ha participado, entre otros trabajos, en los guiones de Logan (James Mangold, 2017), Blade Runner 2049 (Denis Villeneuve, 2017) o la serie Heroes (2006-2007), supone un homenaje por sus planteamientos generales, a la ya mítica versión de 1974, dirigida por Sidney Lumet y adaptada por Paul Dehn, con un reparto espectacular (entonces reunió a Albert Finney, Lauren Bacall, Martin Balsam, Ingrid Bergman, Jacqueline Bisset, Jean-Pierre Cassel, Sean Connery, John Gielgud, Wendy Hiller, Anthony Perkins, Vanessa Redgrave, Rachel Roberts, Richard Widmarck, Michael York, Colin Blakely, etc...). Intenta repetirse la fórmula, reuniendo a un plantel de actores estelar, en cierta medida equivalente al del pasado.

Otras versiones de la novela se pensaron para la televisión, como la aceptable Asesinato en el Orient Express (2001), dirigida por Carl Schenkel (en la que Alfred Molina fue Poirot), o la mini-serie japonesa de dos episodios, Oriento kyuukou satsujin jiken (2015), de Keita Kôno, en la que Poirot pasa a llamarse Takeru Suguro y es interpretado por Mansai Nomura.

Otra cuestión importante era la de decidir la duración de la nueva adaptación. Y se ha optado por aproximarse de nuevo al modelo de Lumet (1974), aunque reduciendo ligeramente las 2 horas y 8 minutos de aquella a 1 hora y 54 minutos de la actual.



También era clave decidir que actor podría darnos el perfil adecuado de Poirot, un belga bastante peculiar al que Agatha Christie convirtió en una inteligente parodia de Sherlock Holmes. Que sea un actor-director británico, con debilidad por Shakespeare (en el cine ha dirigido, adaptado e interpretado con brillantez Enrique V, Hamlet o Mucho ruido y pocas nueces, por citar las que a mi más me gustan) y que no tiene reparos en asumir la dirección de películas de géneros populares como en Thor (2011) o Jack Ryan: Operación Sombra  (2014), permite hacer unos cuantos guiños a la tradición británica literaria y cinematográfica. Como actor es también muy versatil, logrando construir un personaje a medio camino entre el superhéroe y el genio inadaptado. No es fácil asumir a un personaje como Poirot, y es uno de los pocos terrenos en los que la última versión supera claramente a las anteriores. 




Resulta muy divertido para cualquier cinéfilo que se precie (que ya pinte canas, a ser posible) ver cómo se han repartido los personajes y cuáles serían sus equivalentes actuales. La magia de comprobar cómo todos tienen su momento de lucimiento habla muy bien de un guion que sabe, de nuevo, trasladar del papel a las imágenes la habilidad que Agatha Christie tenía para perfilar a sus personajes.

Roberto Sánchez

-Aragonia, C. Grancasa, Palafox, Puerto Venecia, Yelmo-

No hay comentarios: