martes, 23 de agosto de 2016

Money Monster (2016)**

Dir:Jodie Foster
Int: George Clooney, Julia Roberts, Jack O'Connell, Caitriona Balfe, Dominic West, Giancarlo Esposito, Dennis Boutsikaris, Darri Ingolfsson, Christopher Denham, Anthony DeSando, Jennifer Dong, Ivan Martin, Cliff Moylan, Vernon Campbell, Joseph Oliveira, Chris Bauer

La trampa del dinero


Money Monster, cuya traducción literal sería: "el monstruo del dinero", es un thriller que se mueve en el terreno de la denuncia social hacia el idolatrado "American way of life", es decir, el modo y estilo de vida americano donde lo único que importa es el éxito social y monetario a cualquier precio. Con este ideal de vida son muchos los norteamericanos, (y también inmigrantes que creyeron en ese "American dream") los que se quedan en el camino pagando un alto precio socioeconómico e incluso dejándose su propia vida en ello. 

Jodie Foster, aquella inolvidable niña-prostituta de Taxi Driver (papel que interpretó con apenas 13 años), creció y se hizo una gran actriz y, posteriormente también irregular directora (siendo éste su cuarto largometraje tras el extraño El castor, de 2011), eligiendo en más de una ocasión encarnar el papel de mujer "acosada" por el sistema que, como en el caso de La extraña que hay en ti (Neil Jordan, 2007) pasa a convertirse en una justiciera urbana al más puro estilo Charles Bronson. 

Money Monster es un filme de denuncia que, en casi todo el metraje, es soportado por los hombros de su carismático protagonista, un George Clooney que da vida a un showman presentador todoterreno de un programa sobre la bolsa y las inversiones mobiliarias en fondos, acciones y demás productos derivados. 


Grandes estafas económicas como la orquestada por Bernard Madoff o la terrible de Lehman Brothers que produjo en cascada un crack financiero sin precedentes en los Estados Unidos, planean con su alargada sombra como telón de fondo en toda la película. El inversor-estafado como elemento débil de la cadena financiera, es el otro protagonista del filme encarnado en este caso por un joven de nombre Kyle Budwell (interpretado por el actor Jack O'Connell) que, colándose en el plató, da rienda suelta a toda su ira y frustración tomando como rehén a la estrella presentadora del programa (Clooney) y haciéndole responsable de su desgracia financiera al haber seguido al pie de la letra sus consejos."¡Esto es un espectáculo chaval!"  le responderá él– "¡Yo no soy un experto financiero. La bolsa es un casino donde la gente hace sus apuestas y nunca se sabe que va a ocurrir a ciencia cierta...!".  

Y, en efecto es así, el dinero es un monstruo insaciable deseado por todos. Una herramienta social, un lenguaje propio y un vehículo capaz de llevarte a lo más alto o de estrellar al más pintado. Cierto que el personaje interpretado por Clooney (actor  y también director con una filmografía bastante irregular a pesar de haber trabajado a las órdenes de grandes directores como Terrence Malik o los hermanos Coen) intenta justificarse acogiéndose a esta verdad y escudándose en que la televisión es un puro y simple espectáculo de masas. Los verdaderos culpables, los que mueven los hilos de las inversiones y son los causantes de las estafas que arruinan a miles de pequeños inversores, desgraciadamente suelen irse de rositas o, como mucho, cumplen unos pocos años de encierro a la espera de recuperar sus millones en los  paraísos fiscales dónde los tienen esperando a buen recaudo. La víctima es, por tanto, doblemente víctima en este caso, pues además de resultar arruinada económicamente, ve como el sistema castiga sin piedad su "osadía" de saltarse la ley para intentar apenas arañar sin éxito la piel del monstruo.



A pesar de estar bien construido, Money Monster resulta un filme bastante previsible y con un argumento ya tratado con mayor fortuna en otras películas que nos han hablado de las grandes estafas económicas. 

Mantiene la tensión aunque, repito, míster Clooney logra que este intento algo light de denuncia del sistema resulte un espectáculo "non stop" de principio a fin. Así es el show bussines amigos. Que no pare la música. La audiencia ordena y manda. Todo vale y todo es, al final, un puro espectáculo.

Gonzalo J. Gonzalvo.

-Aragonia, Palafox-

1 comentario:

Luis Betrán dijo...

Magnífico. Imposible añadir una sola coma.